Discurso de cierre del V Congreso Mundial de Biodanza. Austria 2002

 Alpbach,  14 de julio de 2002

Mi nombre es Margarita Karger dirijo la Escuela de Biodanza de Madrid, y coordino junto con los profesores Roberto Mirelman y Rodolfo Ladaga Aramburu, así como con todos los directores de las Escuelas de Biodanza del mundo, esta iniciativa de nominación del Prof. Rolando Toro Araneda al Premio Nobel de la Paz y a todos los premios posibles que tengan la categoría que Rolando Toro  merece.

Esta iniciativa es un reconocimiento a su labor con la creación de la Biodanza, en coherencia con su incansable repudio a la obsenidad bélica de todos los tiempos, con su

grito desgarrador desde hace más de cuarenta años en defensa de los derechos Humanos y en defensa de la distribución más justa y equitativa de los bienes del mundo.

Rolando Toro no se ha cansado de pedir que  acabe el hambre en el mundo, que se actualizen las leyes y los códigos en base al Pricipio Biocéntrico, que es el principio que gira en torno a la vida.

 Sus palabra de defensa de los derechos de la mujer y rechazo a todo tipo de abuso contra la humanidad, sus incansables discursos en defensa de la sacralización de la vida, son sólo un mero ejemplo del trabajo por la Paz Mundial que lleva haciendo Rolando Toro desde siempre.

Muchos pensadores expresaron que, este nuevo siglo, será un siglo ético o no será.

En palabras de Rolando Toro “Con una sola generación educada bajo el prisma del Principio Biocéntrico se podría cambiar el rumbo de la historia, es decir, transformándose los rituales de una civilización de muerte en una permanente creación de vida consciente y amorosa.”

“La Educación Biocéntrica muestra claras pautas de renovación de actitudes afectivas en cada uno de nosotros.”

El sueño de la nominación de Rolando Toro tiene unos requisitos y unas fechas a cumplir, pero para nosotros es un acto de tal trascendencia,

Es el ejercicio de gratitud y reconocimiento a la labor de Rolando y a nuestra propia labor, enseñando este sistema de integración afectiva que nos ofrece el aprendizaje de Biodanza, que estimula la bondad, que dulcifica a los seres humanos y que pretende reduce el núcleo de malignidad a su mínima expresión.

Por todo lo antedicho Rolando Toro merece con creces todo este reconocimiento!

El gran literato argentino, Jorge Luis Borges fue siete veces nominado al premio Nobel y nunca recibió ese tan merecido tributo.

Nosotros estaremos luchando hasta nuestro último aliento por lograr está nominación que se proyectará en todos los que trabajamos con Biodanza.

Todos los que quieran colaborar deben hacerlo consiguiendo cartas de adhesión de personas e instituciones de relevancia mundial o de una acción reconocida en sus propias instituciones.

Para finalizar quiero hacer público mi juramento de fidelidad al Principio Biocéntrico, reproduciendo las palabras de Rolando Toro, “si aspiramos a algo más que a sobrevivir, si aspiramos a un mundo digno, pacífico, justo y limpio, habrá que comprometerse para materializar este  deseo, comprometernos con la Paz Mundial, con la distribución más justa y equitativa de los bienes del mundo, acabar con el hambre en el mundo, actualizar las leyes y códigos en base al Principio Biocéntrico, dar  prioridad a la restauración y conservación de la naturaleza y no como cortina de egoismos  feroces. Nadie será fiel a nada sino es fiel a sí mismo.

 Jóvenes del mundo:

 cuando nos unamos para detener el sistema suicida en que vivimos, cuando desobedezcamos cualquier mandato contaminador, cuando nos dediquemos en una hermosa complicidad a conspirar para generar otro orden, mayor y más humano, ¡jóvenes del mundo, lo lograremos!”.

Rolando Toro Araneda que la vida te siga iluminando para guiarnos a todos nosotros.

Margarita Karger

Directora de la Escuela de

 Biodanza de Madrid e Islas Canarias